Respeto y paciencia en el Otoño de la vida
Por: Katherine Medranda Ortiz
“A mis amigos les adeudo la ternura, las palabras de aliento y el abrazo, el compartir con ellos la factura que nos presenta la vida paso a paso”.
Que triste es observar aún en las calles ancianitos pidiendo limosna. Me he preguntado muchas veces ¿Dónde están esos hijos? ¿Acaso tendrán familia?...
Sin duda los valores humanos cada día están en mayor decadencia, porque he obtenido respuestas tales como: “Seguramente fue una mala madre o un padre ingrato”, “Talvés los hijos nada pueden hacer porque ellos igual salen a las calles”; entre tantas otras que solo brindan una excusa a esta lamentable crisis que aún está latente en nuestra sociedad.
Es muy hermosa la labor que llevan a cabo las instituciones y organismos gubernamentales, ciertos grupos, fundaciones y también centros privados en bienestar de los más vulnerables, en especial de los adultos mayores. Dios bendiga esas manos y corazones que día a día no solo regalan abrigo, cuidados, protección y afectos, sino que brindan soluciones a múltiples problemas sociales, porque comparten las aflicciones, enfermedades y el dolor de los demás.
Amigos hoy quiero recomendar la práctica de dos importantes valores en favor de nuestros adultos mayores; el respeto y la paciencia. La VEJEZ es solo una etapa más de la existencia, que se delata en las arrugas de la piel, los cabellos blancos, un caminar lento que dibuja el cansancio de los años; sin embargo solo el ALMA permanece intacta, pero si sabemos nutrirla de buenas acciones y robustecerla en la firmeza a través de los valores.
Es increíble pensar que el ALMA enferma de soledad, tristeza y vacío espiritual y esto suele pasar con frecuencia en los adultos mayores, quienes muchas veces sienten que son una carga no solo para sus hijos sino para una sociedad que los excluye por sus edades avanzadas.
Aprendamos todos a mantener RESPETO por los cabellos blancos de nuestros abuelos y padres, respeto a su poca lucidez y a sus frágiles o fuertes temperamentos, respeto a esos seres que depositaron sus más grandes anhelos en favor de la patria; PACIENCIA para saber escucharlos y comprenderlos con amor; paciencia para apoyarlos en sus temores y quebrantos de salud; paciencia para sus últimas fantasías aunque nos parezcan infantiles.
No olvidemos que todos algún día vamos a envejecer y es un triunfo llegar a la edad dorada con la mirada en alto y la conciencia en paz; por ello es necesario recordar que lo que hoy hacemos con nuestros abuelos, padres, incluso con extraños, la vida nos devolverá en bien o en mal según nuestras acciones.
“Aún en el OTOÑO la VIDA sigue siendo simplemente maravillosa”.
Les invito a mirar unas fotos de la ejemplar labor que realiza el IESS DE MANTA gracias a la iniciativa y el apoyo de su Director Dr. Hernán Salazar Vega, junto a "KINSEI RYU" a través de su Jefe Instructor Mirko Patrel en el IESS de Manta, quien imparte la gimnasia terapeútica basada en artes marciales tradicionales japoneses denominada"AI -HO" y otras actividades que se realizan y que respaldo en calidad de Directora de la Escuela de Formación Marcial en bien de la comunidad y para atender con amor a nuestros adultos mayores:
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